miércoles, 7 de noviembre de 2007

Helas, la peau de la gauche est si douce, I think so



Siempre me he preguntado como es posible que un personaje como Iñaki Gabilondo sea considerado de izquierdas. Quiero decir, por hablar con claridad y concisión que, considerado desde parámetros de izquierdas, es imposible considerar de izquierdas a alguien tan instalado en el sistema y lejos de la izquierda como el amigo Gabilondo. Y otro tanto cabe decir de su jefe el Sr. Cebrián, autor de La Rusa, novela ignota que le abrió la puerta de la academia supongo que con un Kalashnikov.


Bueno, lo que quiero decir es que ser de izquierdas como Gabilondo y Cebrián debe ser un chollo.
Con todo ésto no quisiera que pensaseis que Iñaki me cae mal. En absoluto. Y para que no exista la mínima duda de que no pretendo ser ecuánime os diré que me llama profundamente la atención que Iñaki, que de todos los comunicadores del Star-system español es el que tiene más ramalazo jesuítico y discurso adoctrinador sea tan antiepiscopal.

Comento ésto a raiz de oir al insigne comunicador despotricar contra la COPE, contra El Mundo, contra Federico Jímenez Losantos, contra Pedrojota y contra el "sunsum corda" si es que el "sunsum corda" critica a Zapatero y al PSOE que no lo tengo constatado. Es curioso el afán censor de los que se quejan de lo mucho que sufrieron con la censura franquista (?).

Pero lo que me sorprende, aunque no lo he encontrado en ningún medio, es lo que le he oido en una grabación de esa misma intervención. Se queja Gabilondo de que lleva una temporada que la gente por la calle le interpela y le echa en cara algunas cosas que ha dicho. "No menos de tres veces al día", creo. Llama la atención la delicadeza de la piel de estos sedicentes intelectuales progresistas de izquierdas. La agresividad contra la derecha está bien, es la derecha extrema que dice Zetape; toda leña es poca para la caverna. No es violencia, es terapeutica. Pero "cómo se atreven a interpelarme a mí, al príncipe de las ondas, al Brummel de la galaxia Marconi, al progresista de toda la vida".

Lo dicho, que estos chicos, no tan chicos ya, de la hermosa izquierda progresista no aguantan una avispa en los cojones, y perdón por la forma de señalar.




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"Nunca he visto tantas banderas españolas juntas, es una orgia nacionalista"

(Joan Tardá)


Este señor de la foto, el de la derecha, el que ha salido con cara de ser más listo que el de la izquierda, el de bigote y gafas, se llama Juan Tardá y es diputado de ERC. Y ha dicho que lo de Melilla y Ceuta ha sido "una orgía nacionalista españolista enmarcada en una "cabalgata". Se trata de una exaltación de españolidad con un cariz nacionalista que está fuera de los tiempos" y ha aprovechado para pedir al rey que en Melilla se exprese también en lengua tamazight que es la que hablan un montón de melillenses y ha considerado "una vergüenza que el Estado español no haya incorporado al sistema escolar" la citada lengua.
Mi madre decía aquello de "apártate que me tiznas, díjo la sartén al cazo". Supongo que también le parecerá una orgía lo de CiU y sus 4.ooo senyeras. ¡Ah, y la foto de abajo que no es de las más nutridas banderísticamente hablando de las que he visto.Tardá, atento a la paja en el ojo ajeno que no deja ver la viga en el propio. Un saludo, amigo.


(Reunión de nacionalistas ejerciendo su derecho a llevar banderas unipersonales. Ojo que ésto no es una orgía sino un acto de afirmación identitario)

3 comentarios:

J. F. Sebastian dijo...

Gabilondo y Tardá comparten una cosa: fariseismo.

mon amour dijo...

Pues si... todo un refernte de la comunicación de este país ha terminado haciendo de fiel mamporrero de su señor... entre paños menores se maneja, en paños menores como los falsos suicidas del 11M... ah, que no fue culpa de él y que hay redactoras de la ser con muy mala leche que parecen infiltradas del federico. En fin, que si no aguanta una broma...

... y tardá... voilà la mosca cojonera!!!

Anónimo dijo...

Permítame una objeción, señor Docwal. Sabe usted que muchos dirigentes de ERC se autodefinen como independentistas y no nacionalistas. Eso es perfectamente posible pero ¿a que jode?

Por otra parte, convendrá conmigo (aunque joda)en que hay que temer y prevenirse de los nacionalismos en proporción directa a su capacidad bélica.